Instituciones educativas deberán hacer oferta de alimentación escolar balanceada

La medida, implementada hasta ahora en 270 instituciones públicas de la ciudad, incluye un proceso pedagógico para que los niños cambien sus hábitos alimenticios y aprendan a comer sanamente.

Dato clave

Obesidad en Cali

El 13,5% de los menores en edad escolar de la ciudad tiene sobre peso y el 5,3% es obeso.

En 2007 el número de niños con obesidad fue de 4.800, mientras que en 2010 fue de 6.500, lo que implica un aumento significativo.

En Colombia uno de cada seis menores tiene sobrepeso u obesidad.
El decreto Municipal que exige a todas las tiendas escolares tener una oferta de alimentos saludables es el 666 del 2010.

La estrategia de Tiendas Escolares Saludables es única como iniciativa local en todo el país y ha sido reconocida como ejemplo de salud urbana para otros países de latinoamérica.

Bernardo Peña/El País

Como producto de los indicadores que señalan que en Cali el número de niños con obesidad ha aumentado progresivamente, la Secretaría de Salud intensificará las acciones para que las escuelas y colegios privados de la ciudad cumplan con la estrategia Alimentación Escolar Balanceada, que obliga a que en estos sitios se haga una oferta de comida saludable.

La medida, implementada hasta ahora en 270 instituciones públicas de la ciudad, incluye un proceso pedagógico para que los niños cambien sus hábitos alimenticios y aprendan a comer sanamente.

Según el secretario de Salud de Cali, Alejandro Varela, “la iniciativa se ha aplicado hasta ahora en colegios públicos y algunos privados, pero de aquí al final de año, todos los colegios deberán seguir esta norma, porque es de obligatorio cumplimiento”. El funcionario agregó que algunos de los colegios privados que tienen un modelo de alimentación sana en Cali y se han tomado como ejemplo para las otras instituciones son Luis Horacio Gómez, el Liceo Francés y el Berchmans.

Ruby Castellanos, nutricionista de la Secretaría de Salud, afirmó que “la medida no es coercitiva, es decir, se seguirán vendiendo dulces, comida chatarra y demás, pero también se ofrecerán alimentos a base de fruta y lácteos. La idea es que haya un acompañamiento desde las aulas, creando hábitos en los niños para que ellos mismos escojan la comida saludable”.

La estrategia

El proyecto de Tiendas Escolares Saludables de la Secretaría de Salud busca transformar los hábitos, tanto de oferta de las tiendas escolares, como de consumo por parte de los estudiantes.

Para ello se realizan constantemente capacitaciones a tenderos, con el fin de que incluyan en su oferta alimentos que aporten un alto valor nutricional para los niños y disminuyan su riesgo de obesidad.

Para Adriana Rivera, encargada de la tienda del colegio República de Costa Rica, y que ha sido tomada como ejemplo por la Secretaría de Salud, la clave está en “ingeniárselas para que los niños se animen a comprar productos saludables. Para ellos es mucho más barato algo frito o un dulce que una porción de frutas. Sin embargo, yo las preparo en porciones pequeñas y las adorno para que se las coman con gusto y les salga barato”.

María Ximena Pérez, docente de cuarto de primaria del colegio Fernando Velasco, es positivo que el programa venga acompañado desde las aulas, pues “incentiva a los niños a alimentarse bien, mediante actividades. Para ello los ponemos a dibujar las frutas más saludables o a hacer carteleras que informen sobre los buenos hábitos alimenticios. A veces incluso hacemos compartir de frutas para que ellos se motiven y lo acojan como una costumbre”, indicó.

Otra estrategia aplicada es ‘El miércoles de frutas’, día en que los estudiantes llevan sólo este producto como merienda.
“La idea es que los padres también se unan a este proceso, inculcando a sus hijos llevar productos sanos para su refrigerio”, dijo el Secretario de Salud.

Alimentos saludables

Nutricionistas sugieren que para la hora de la merienda, los alimentos más nutritivos y de mayor valor nutricional son las frutas, lácteos y vegetales.

Se recomienda evitar alimentos fritos o ‘comida chatarra’, al igual que gaseosas y dulces.
A la hora del almuerzo se debe proporcionar a los niños una proteína, un carbohidrato, una porción de vegetales y fruta.