Hay 578 restaurantes que
incumplen normas
El
Grupo de Riesgo de Consumo de Salud Pública Municipal precisó que muchos
negocios no ofrecen las condiciones más óptimas para manipular alimentos.
En
Cali, muchos restaurantes, panaderías y cafeterías que ofrecen almuerzos
ejecutivos o comidas rápidas, en su mayoría, no están cumpliendo con los
requisitos sanitarios que exige la ley. Incluso, en algunos se han hallado
alimentos vencidos o en su defecto, contaminados con bacterias fecales.
Según
un informe del Grupo Riesgo de Consumo de
“No
cumplen porque la manipulación de los alimentos no es la conveniente, no hay
una higiene personal adecuada, las instalaciones locativas no cumplen con la
limpieza necesaria, el almacenamiento no es el adecuado o los utensilios no
tienen el aseo apropiado”, dice Margarita López, funcionaria del Grupo de
Riesgo.
López
agrega que en ocasiones se le entrega un concepto desfavorable a un lugar
“porque, por ejemplo, no tiene certificado de capacitación en el manejo de los
alimentos por parte de algunos de los empleados, un requisito indispensable
para que el consumidor se sienta tranquilo a la hora de comer un alimento en un
establecimiento”.
Entre
los negocios analizados están restaurantes, cafeterías, panaderías,
supermercados, plazoletas de comidas en centros comerciales y cafeterías en
escuelas y colegios. De esos lugares muestrados, a
diez negocios se les ha aplicado la medida sanitaria de seguridad, es decir,
multas, decomisos de productos y cierre total.
“Lo
más común es la parte de los decomisos de alimentos que no tienen etiquetas del
Invima, no hay registro de lotes de producción y
están vencidos. También hay productos decomisados en mal estado”, asegura
López.
Hoy,
por esta medida sanitaria, hay dos negocios con cierre parcial, tres con
suspensión de actividades y cinco con decomiso de productos. Para este segundo
semestre, se duplicarán los controles que se hacen cada ocho días.
Presencia de hongos
De
457 muestras, 298 fueron sometidas a análisis microbiológico y
Un investigador de Salud Pública, que omitió su nombre, estima que un 20% de
los establecimientos analizados tienen muestras negativas ya sea microbiológicas o fisicoquímicas.
Sabemos
cómo manipular el pan, pero no sabemos cómo manipular la materia prima que llega
a la panadería. Allí, seguramente, cometemos errores, pero nadie nos dice nada,
ni nos capacita como debe ser.Bernardo Álvarez,
panadero.“Hay
dificultades en los procesos de manipulación de alimentos lo que ocasiona
muestras negativas. Hemos hallado problemas en cafeterías de supermercados y en
restaurantes. Se les ha advertido a los lugares, pero deben comenzar a
corregirlas”, dice el especialista.
Henry
Ramírez, inspector de Salud Pública Municipal, advierte que tras sancionar a
los negocios éstos necesitan asistir a una capacitación donde se les explica
cómo deben ser las condiciones del lugar. “Yo les digo que sus negocios son
desaseados. No voy a decir mentiras porque esto es grave”, manifiesta.
Según
Bania Guerrero, coordinadora de
Guerrero
manifiesta que para este segundo semestre, en convenio con el Sena, capacitarán
a los vendedores de alimentos de la galería Alameda para luego extenderse a
otras zonas.
“Nosotros
tenemos un estudio detallado de los restaurantes de Cali y hemos hallado que a
los caleños aún les falta mucho por aplicar la norma sanitaria en los
alimentos, algo que es fundamental en un negocio”, agrega.
Carolina
Muñoz, directora ejecutiva de
Van 288 restaurantes cerrados
Por
su parte, la oficina de Convivencia y Seguridad de
Efraín
Sierra, director de la oficina de Convivencia y Seguridad, sostiene que estos
cierres son, principalmente, porque no tienen los documentos básicos, entre
ellos, el uso del suelo; presentan alto impacto sonoro o no cumplen con los
registros sanitarios, aunque eso es competencia de
“Se
presentan muchos cierres porque hay mucha informalidad en la apertura de los
negocios y como no tienen recursos no cumplen con requisitos sanitarios, ni con
papeles autorizados para abrir un establecimiento. Hemos encontrado que llegan
las autoridades a los lugares y la gente prefiere cerrar porque saben que no
cumplen con las reglas”, sostiene Sierra.
La
representante de Acodrés, Carolina Muñoz, dice que
unas de las soluciones es realizar un convenio con
El
inspector Ramírez va más allá y pide que se hagan capacitaciones constantes a
empleados y más inspecciones rigurosas a los establecimientos para señalar a
los que violan la ley. “Porque una multa es buena opción, pero la pagan y no se
hacen las correcciones necesarias y los requisitos sanitarios continúan sin
cumplirse”.